Mi experiencia con «Oposiciones Técnico Ferroviario» ha sido muy positiva.
Por hacerlo sencillo, sin su ayuda, asesoramiento y apoyo, no hubiese sido capaz de sacarme la plaza y mucho menos en 4 meses y combinándolo con un intenso trabajo en la empresa privada.
Los principales puntos positivos que he encontrado son:- Te marcan los ritmos desde que sale la convocatoria. Especialmente útil son los diferentes simulacros. Cuando empecé, me planteé la preparación como una carrera de fondo, con diferentes hitos a corto plazo (mensualmente más o menos) en forma de simulacro, de forma que en cada simulacro tenía que llegar con opciones sin “descolgarme”. Al ir cumpliendo con los diferentes simulacros, vas cogiendo confianza para lo que queda, además que vas cogiendo práctica del examen, de los tiempos que requieren cada parte, etc. El ir al examen habiendo hecho hasta 5 simulacros es clave para ir bien preparado al examen, donde cada minuto cuenta y más en un día de muchos nervios.
- Te hacen digeribles los diferentes temas que de por si son complejos (intentar estudiar las leyes tal cual es implanteable), además de interrelacionar los diferentes temas y destacar aquellas partes más importantes.
- Metodología flexible para el alumno. Te permiten asistir a las clases presenciales, como seguirlas online, tanto en directo como en diferido con posterioridad, las veces que necesites. Igual sucede con los simulacros, mientras que los primeros son para hacerlos cada uno en su casa, los últimos, ya con todo el temario, te dan la opción de hacerlos de forma presencial en “modo examen”, para medirte en unas condiciones parecidas a las del día del examen.
- Información sobre plazos, notas de corte para cada plaza, experiencia de oposiciones previas, etc.
- Seguimiento con posterioridad al examen hasta la incorporación: preparación de entrevistas (para los técnicos), resolución de dudas en cuanto a plazos, documentación a entregar, perspectivas de incorporación, etc.
Con esto, para llegar con posibilidades en esta oposición (como con muchas otras) es imprescindible la constancia y mucho esfuerzo, además de templanza y una buena dosis de suerte el día del examen.